Yo lo comí: Bioghurt de soya frutilla de Zen Organics

En mi búsqueda de sustitutos para los alimentos lácteos que solía comer, llegué -gracias a mi hermana- a los bioghurt de soya de la marca chilena Zen Organics. Su envase de vidrio equivale a dos porciones (lo supe cuando me lo comí entero jo!), dura 1 mes y promete transformarse en un equivalente al yogurt de leche. Yo comí el de frutilla y hoy te cuento qué me pareció.

Bioghurt de soya frutilla de Zen Organics

A veces es necesario leer más de un producto antes de comerlo. Les confieso que mi hermana me regaló el Bioghurt de soya frutilla de Zen Organics y lo miré de la misma forma que lo hacía con los yogurts de leche de vaca. Es decir, como postre o comodín de un momento de mucha hambre.

Sin embargo, mi primera impresión al probarlo fue un poco de decepción, porque me pareció algo ácido y desabrido. A pesar de las frutillas, muy poco perceptibles para mi gusto (unas pocas en trozos grandes al final del envase).

No obstante al entrar al sitio de la marca para escribir esta reseña leí que se podía usar para batidos y helados mezclado en partes iguales con frutas y endulzado con miel, azúcar rubia o sucralosa; como sustituto de la crema de leche en variadas preparaciones, dulces y saladas; en mezclas con cereales y frutos secos para el desayuno, etc. Estas recomendaciones me abrieron un mundo de posibilidades y relativizaron mi percepción inicial.

Ergo, creo que les daré una nueva oportunidad, esta vez con los consejos de la misma marca.

¿Dónde comprarlo? En la tienda física y virtual de Punto Saludable. Sin embargo, en su sitio también leí que está en Jumbo y en muchas otras tiendas más.

¿Cuánto cuesta? $1.390

Ingredientes: leche de soya, cultivos lácticos (lactobasilus bulgaricus), sacarosa 0,8 g, frutilla, azúcar, ácido cítrico, pectina, sorbato de potasio, benzonato de sodio, ácito tartárico.

Y tú ¿lo comerías?